De chigres por Oviedo

De FELIPE ESCUDERO Cantar en los chigres, una iniciativa que los jueves vuelve a llenar las sidrerías de Gascona, en Oviedo. La calle, bautizada como Bulevar de la Sidra y que en los últimos años se ha convertido en el centro neurálgico de la ciudad, por su alta concentración de locales y su constante actividad, inició hace una semana la segunda edición del certamen “Cantares de Chigre”. Un certamen que se celebra en memoria de José Bernardo, hostelero del "bulevar de la sidra", y que todos los jueves, a partir de las 20,30 horas, permite disfrutar en las sidrerías desde solistas como José Luis, guitarra y armonica, Jesús Gallardo y sus corridos mejicanos y los cantantes Laura Riego, José Luis "El Presi" y Fran Pola, a grupos corales como el Ochote Asturias, Santa Apolonia de Pañeda y el Centro de Día "Covadonga". Un motivo para compartir y disfrutar de la sidra, tapear, escuchar a estos intérpretes y, también, cantar a placer.

El Pueblo ejemplar, n'asturianu

De FELIPE ESCUDERO En su XXV edición, y por primera desde su creación, el Reglamento del Premio al Pueblo de Asturias de 2014 se edita en asturiano y gallego-asturiano. La Fundación Príncipe de Asturias, que convoca el galardón desde 1990, ha contado para ello con la ayuda del Servicio de Política Lingüística de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno del Principado de Asturias. Un hito bien recibido por numerosos colectivos que, aunque se quejen de la tardanza en una iniciativa como esta, reconocen el valor del gesto. El Premio, dotado con 25.000 euros, se instauró en 1990 al conmemorarse el décimo aniversario de la Fundación, y está destinado a reconocer al pueblo, aldea, núcleo de población, espacio paisajístico o grupo humano del Principado de Asturias que haya destacado de modo notable en "la defensa y conservación de su entorno natural, ambiental, de su patrimonio histórico, cultural o artístico, en iniciativas de impulso económico y social o en la realización de obras comunales u otras manifestaciones de solidaridad sobresalientes". La convocatoria anual de este Premio ha constituido un gran éxito de participación en toda la región, sin duda estimulado porque es el propio Príncipe de Asturias quien cada año, tras conceder los Premios Príncipe de Asturias, se desplaza a la localidad premiada para conocerla, pasar unas horas con sus gentes y hacerles entrega de la dotación económica. El plazo de presentación de candidaturas para este galardón en la edición 2014 finalizará el 7 de agosto. Toda la información en www.fpa.es

Gamonal

El levantamiento del barrio burgalés de Gamonal ha sorprendido al país en su ensimismamiento por la acción del Gobierno y en su aletargamiento por la bonanza de la última década y el revolcón de la crisis. Pero no tiene por qué, porque el episodio tiene todos los elementos para ser un nuevo Fuenteovejuna. Vamos a ver: –Gamonal es un barrio obrero de Burgos situado en el extrarradio, pero a orillas de la principal avenida de la ciudad (lo que sería La Calzada en Gijón o Ventanielles en Oviedo). Es como la calle Alcalá de Madrid: en el número 2 está Banesto, en el número 200 viven los profesionales acomodados y termina a orillas del aeropuerto, con un polígono industrial. –En ese barrio un constructor quiere levantar un precioso bulevar, que tiene la particularidad de que destruye la mayoría de las plazas de aparcamiento y las sustituye por un párking subterráneo en el que cada vecino debe comprar una plaza. –El constructor de marras es el inefable Méndez Pozo, un multimillonario corrupto dueño de medio Burgos que estuvo en la cárcel hace veinte años por sus escándalos urbanísticos. –Pero compró el 'Diario de Burgos' para acallar las informaciones sobre él y adquirió una carísima rotativa en la que se imprimen todos los periódicos para el Noroeste de España... los pequeños, por supuesto; pero también 'El País', 'El Mundo', el 'As', el 'Marca', etcétera. Menos 'ABC' (cuya grapa hace difícil buscar impresores alternativos) todos, con lo que lleva años desaparecido de la primera línea de información. –Después de salir de la cárcel, Pozo recuperó sus excelentes relaciones con el PP local durante el mandato de Juan Carlos Aparicio –que fue ministro con Aznar–. Y de aquellos barros vienen estos lodos. –Hay dos periodistas que en España se lo saben todo de Méndez Pozo: Arsenio Escolar (padre del conocido Ignacio Escolar y actual director de 'Veinte Minutos') y Pachi Larrosa (que debe de andar de redactor-jefe por 'La Verdad' de Murcia). Había un tercero, José Luis Estrada, pero lamentablemente murió hace un par de años.

Pinillos

Acabo de leer que murió ayer en Madrid el profesor José Luis Pinillos y tengo el corazón en un puño: a este psicólogo le hice yo mi primera entrevista como periodista (entrevista como género; ya había publicado otras informaciones). Fue en Casa Fermín de Oviedo, hace 27 años, y luego le enseñé aquella maravillosa ciudad que rezumaba saber por todas partes gracias a los premiados por la Fundación Príncipe de Asturias entre los que estaba él mismo (era la época en que acababas en Babilonia... qué tiempos). Pinillos había emergido como gran estudioso médico de la Psicología española en una época en la que ésta estaba dominada por Vallejo Nájera, un buscador infatigable del gen enfermo que lleva a los marxistas a estar equivocados en sus opiniones. De esa familia llegó luego un libro ('Locos egregios') que enseñó a los españoles que los autoritarismos de todas las épocas estaban dirigidos por un chalado –no decía nada del franquismo, pero muchos lo sobreentendimos rápidamente– y más tarde un personajillo que aún anda dando guerra por ahí. Pero lo de Pinillos era otra cosa: era el saber, la Universidad y el señorío. Porque este señor era, al mismo tiempo, un gran investigador y el abuelo que todo el mundo querría tener. Veo ahora sus fotos y le recuerdo perfectamente, con su pelo blanco, su pajarita y ese aire que le hacía parecerse al fundador de la librería Cervantes de Oviedo y a Caro Baroja. Las circunstancias me obligan a despedirme hoy de José Luis Pinillos definitivamente, pero lo hago con la seguridad de que sus enseñanzas estarán para siempre conmigo. Ciao, profesor.

A tope

Me sale el trabajo por las orejas, porque estoy ultimando un proyecto que se pondrá en marcha en octubre (en www.astures.info). Volveré por aquí después de eso.

Bobadas

No puede Don Gato mantenerse de vacaciones al margen mientras se discute en España sobre la última ocurrencia de la ministra Báñez o sobre la actitud del ministro Margallo frente a Gibraltar: lo de éste último se explica muy bien ("Gibraltar, español"), como una forma de encontrar algo que llame la atención para que la gente no hable de Bárcenas, y lo de aquélla rememora mejor que nada tiempos pasados: denunciar a la mala gente es desde ya tarea de los buenos españoles. Jesús, qué gentuza!

Periodismo

Despierta este blog de su letargo estival para leer la cartilla a eso que se llama 'Periodismo ciudadano'. Advierte Don Gato a sus nuevos colegas de algunos rudimentos de esta profesión: en una tragedia como la del tren de Santiago, el periodista presta servicio en las primeras horas, informa en las siguientes e investiga de ahí en adelante. Contra lo que parece por la tele, los periodistas no tienen opinión (la tienen los analistas, entre los que puede haber algún periodista) y deben poner mucha atención en no dejarse llevar por el ambiente. En este caso en concreto, todo indica que el conductor iba a más velocidad de la permitida, pero la culpabilidad de un accidente en España sólo la determina un juez (mucha gente piensa ahora mismo que Rajoy es un delincuente, pero nadie se lo puede llamar porque le ampara la presunción de inocencia, sin ir más lejos) y las instituciones españolas estarán ahora empeñadas en encontrar a un villano, para evitarse la responsabilidad civil subsidiaria con las víctimas. Si a alguien le resulta tedioso tener en cuenta todo esto, igual no está en condiciones de hacer de periodista... por fácil que se lo pongan las redes sociales. Por cierto, difundir la cara del conductor, cuando muchas familias estarían dispuestas a matarle, es una canallada de mucho cuidado. Nadie dijo que ser periodista fuera fácil.